El Consejo Profesional de Ciencias Económicas del Chaco se convirtió en el primero del país en conseguir la autorización para que los profesionales puedan circular y acudir a sus lugares de trabajo, durante la cuarentena.
“La crisis sanitaria provocada por el Covid-19, y las fuertes medidas que se tomaron para combatir su propagación, afectaron las costumbres diarias, y el desempeño normal de los profesionales en ciencias económicas”, expresaron desde el Consejo.
Y añadieron: “Al no ser considerada como actividad esencial, esta profesión independiente se encontró con dos grandes obstáculos: la imposibilidad de concurrir a los estudios particulares, y un Consejo Profesional obligado a cerrar sus puertas”, indicaron.
Tomando nota de dicha problemática, «que afecta directamente el ejercicio habitual de la profesión, el CPCE se propuso acompañar a nuestros matriculados, por lo que emprendimos e iniciamos tramitaciones con la finalidad de aliviar la difícil situación ayudándolos a realizar sus tareas en tan complejo contexto», sostuvo Germán Dalghren, presidente del CPCE.
Por lo que “llevamos adelante distintas acciones ante el gobierno de la provincia, no exentas de enormes riesgos, pero convencidos de que era lo que había que hacer», agregó.
«A sabiendas de la gran responsabilidad que tal medida conllevaba, preparamos un protocolo de estricto cumplimiento y dimos a conocer el procedimiento a seguir para obtener el certificado de permiso para circular, entendiendo esta autorización siempre como una excepción y no como regla general, ya que dentro de lo posible, debemos y promovemos quedarnos en casa», sostuvo por su parte Lucas Clemente, vicepresidente del CPCE
Y finalmente, sobre la obligación de cerrar las puertas, el CPCE estableció un sistema de guardias mínimas para garantizar la atención del flujo de trabajos prioritarios emergentes durante esta cuaretena.